

La situación del programador sueco Ola Bini continúa sin solución legal. Aunque fue liberado tras concedérsele un hábeas corpus, todos los viernes se presenta en la Fiscalía de Pichincha y sigue con medidas cautelares, como la prohibición de salida del país y el congelamiento de sus cuentas.
Según su abogado, Carlos Soria, a pesar de que se presentó una recusación contra la jueza Yadira Proaño, la magistrada deberá conocer nuevamente el caso, y ha fijado fecha para el 9 de marzo para la audiencia preparatoria de juicio. En la audiencia, explicó Soria, se planteará la nulidad del proceso y se pedirá el archivo de la causa, pues la Corte Provincial de Pichincha consideró ilegal la detención del sueco y también la forma en la que se obtuvieron las pruebas en su contra.
Desde octubre, cuando la audiencia se suspendió por las protestas de ese mes, no ha habido mayores novedades en el caso, en donde se acusa a Bini de haber ingresado sin autorización a un servidor de la CNT, si bien la prueba es una captura de pantalla en donde se ve la pantalla de ingreso al servidor pero no parece haber ocurrido la intrusión, destaca el abogado.
Mientras tanto, Bini continúa trabajando en desarrollo de programas de código abierto y en seguridad digital desde su departamento, pues, asegura su abogado, tiene todavía clientes en el mundo que contratan sus servicios y con los cuales se comunica por medio de la internet. Bini tiene ya una visa de inversionista con la que cual se ha legalizado en el Ecuador, aunque los USD 40 mil que invirtió están congelados.
[RELA CIONA DAS]




NUBE DE ETIQUETAS
[CO MEN TA RIOS]
[LEA TAM BIÉN]




[MÁS LEÍ DAS]



