Pascual del Cioppo es enfático: la postura del Partido Social Cristiano (PSC) con relación a no crear ni apoyar más impuestos es la discrepancia más significativa con sus flamantes aliados del CREO de Guillermo Lasso, cuya candidatura a la Presidencia de la República han aceptado apoyar con toda su estructura nacional. Pero aunque hay diferencias como esas en la perspectiva económica, el PSC de Jaime Nebot y el CREO de Lasso tienen más coincidencias que divergencias, sobre todo, en la forma en la que creen que debe ser manejado el país y en los valores del centro derecha.

Y aunque el bastión del PSC está en Guayaquil y en las provincias de la cuenca del río Guayas, Del Cioppo es optimista sobre que su estructura de alianzas le permitirá generar un apoyo nacional a Lasso, cuya penetración sobre todo en Quito y en la Sierra central -que se evidenció en las pasadas elecciones presidenciales de 2017- esperan poder repetir. 

Conversamos con el líder del PSC sobre las perspectivas de la alianza del centro derecha con base en Guayaquil. 

¿Cuál es el aporte socialcristiano a la candidatura de Lasso? ¿Tiene posibilidad de poner una estructura nacional en esa campaña?

El acuerdo electoral que se ha hecho entre el PSC y CREO para apoyar la candidatura de Guillermo Lasso a la presidencia y del doctor Borrero a la vicepresidencia es una alianza que va a tener a nivel nacional compromisos del PSC en la campaña, como es lo lógico. Por supuesto, antes de nada tenemos que ganar y para ello hay un compromiso nacional de todas nuestras estructuras como alcaldes y prefectos, así como en juntas parroquiales y directivas nacionales y provinciales, para hacer un solo equipo para apoyar, hacer campaña y ganar con Lasso. La alianza se hizo porque hay similitudes entre ciertos puntos ideológicos entre ambos partidos, así como ciertas posiciones similares en temas como democracia, libertad, progreso, y en valores como la defensa de la familia y de la vida. 

Pero en el pasado han tenido discrepancias con CREO, cuáles son los puntos en los que no hay acuerdos, porque ustedes han señalado algunas diferencias personales entre Nebot y Lasso que se mantienen. ¿Qué divergencias se mantienen en esta alianza?

Las diferencias pueden existir  con CREO en aspectos como cuando ellos han creído que parte de la solución de los problemas de déficit financiero a nivel de macroeconomía pueden darse con mayores impuestos, o con aumentar los existentes. Nosotros creemos que esa es una política errada, CREO tendrá sus razones de haber votado en su momento en la Asamblea por aquello, pero definitivamente esa es una diferencia. Otra podría ser llevar los planes de prioridad en alcaldías y prefecturas, pero es obvio que las haya somos partidos distintos. Tenemos similares pensamientos y formas de llevar el país y en otros hay esas diferencias.

Otro matiz ha sido que el PSC ha sido crítico de este Gobierno mientras CREO hizo una alianza en la Asamblea para apoyarlo. ¿Cómo vieron ustedes la cercanía de CREO con Lenin Moreno y su pacto legislativo?

Eso es un tema que nos nos compete. Debe responderlo CREO, que tendrán sus razones. Pero nosotros no estuvimos con el Gobierno, estuvimos en la oposición cuando quiso solucionar el problema macroeconómico elevando impuestos y creando unos nuevos. Nosotros tenemos una posición muy clara sobre como financiar la economía y esas posturas fueron públicas. Además, nuestra posición es que la economía fluya en la parte privada, lo que no es nuevo. Ellos, insisto, tendrán sus razones en esa postura, y ellos deben explicarse.

¿Cómo fue la génesis de esta alianza? ¿Cómo se negociaron estos acercamientos? ¿Cuáles fueron las circunstancias del acuerdo? ¿Hubo alguna dificultad para lograr el entendimiento?

Las conversaciones y acuerdos fueron durante algunos días y participaron las altas dirigencias de ambos partidos, así como Jaime Nebot y Guillermo Lasso. Como todo fue en función de tener una unidad y de llevar un modelo para que el Ecuador salga del empantanamiento, no fueron ni muchos días ni muchos análisis. Hubo coincidencias, gratas por cierto, para las dos formaciones políticas. En lo macro estuvimos siempre de acuerdo y vamos a plasmar eso en un plan de gobierno que será presentado por el candidato Lasso, y algunos puntos están ya en el acuerdo suscrito. Para ser una alianza no nos demoramos mucho porque las coincidencias fueron muchas, las discrepancias se mantienen, sobre la gobernabilidad ya veremos qué pasará, porque nosotros mantendremos nuestras posturas y no las vamos a cambiar. Las similitudes se plasmaron en un documento, creo que para sacar al país adelante no hay que ser Mandrake, sino tener solo algo de sentido común y poner las cosas que son de conocimiento general en un documento y hacerlo. Lo importante es la decisión de un candidato de hacerlo de manera inmediata. Ese sería el éxito del próximo presidente de la República.

El candidato Lasso ha hecho un llamado a Otto Sonnenholzner y a Álvaro Noboa a que se sumen, ¿cómo lo tomaron ustedes?

Como algo totalmente positivo. También es parte de las conversaciones llamar a un solo gran frente para sacar al país adelante, eso es un acto madurez política, invitar a los otros posibles postulantes. No le vemos otra que un cambio total del modelo de cómo manejar el Ecuador de los últimos 15 años, hacia un modelo diferente, un país diferente que todos queremos. En la mayoría de los puntos para gobernar estamos las dos organizaciones con pensamientos similares. 

¿Qué balance hace del panorama electoral actual? Por un lado está el correísmo, por otro lado las fuerzas del centro izquierda sobre todo serrano, ¿es posible que ustedes logren más votos y lleguen al poder?

El voto duro del correísmo no es nuestro mercado electoral. Y el voto de los socialismos tampoco, esos segmentos no afectan nuestro voto duro y más bien entre ellos se pueden ver afectados, por ser corrientes similares y eso depende del electorado que ellos supuestamente tienen en cada provincia. En el caso nuestro, nuestra postura es clara frente a los socialismos, los estatismos y los modelos cepalinos, por lo tanto ni nuestro voto lo van a obtener ellos ni ellos el nuestro.

¿Pero su alianza no es sobre todo costeña? ¿Qué perspectivas tienen para obtener votantes en la Sierra?

La alianza es nacional. El PSC tiene alcaldes, prefectos, vocales de juntas parroquiales, en todo el Ecuador, no solamente en la Costa. Hemos recuperado alcaldías y prefecturas en la Sierra luego de varios años. Así que no solamente estamos en una alianza costeña, como se quiere decir, el candidato Lasso ya obtuvo en 2017 un aceptación brutal en provincias de la Sierra central, y esa estructura y aceptación la van a mantener. 

Eso fue gracias al apoyo de grupos indígenas en la Sierra central, ¿cree que se puede repetir?

Claro que sí. Hay centros comunales con población serrana que apoyarán a Lasso. Hoy por hoy hay que ver quién tiene la actitud para sacar al país adelante. Si eso pasa tendremos un presidente exitoso en los próximos cuatro años.

¿El correísmo tiene posibilidades o es un fenómeno de redes sociales? ¿Ellos quieren hacer lo mismo que los peronistas argentinos y recuperar el poder con una figura light como Andrés Aráuz?

El correísmo tiene su electorado, eso no se puede desconocer. Eso es respetable, no es del 2%, es un electorado respetable e interesante en el Ecuador. Ya sabrá el votante correísta que decisión tomar cuando tengan sus candidaturas. No hay que menospreciar a ningún movimiento ni candidato, todos tienen derecho a participar, estamos en democracia y debemos respetar la posición de los otros. Todos tienen derecho a participar de manera limpia y transparente. Debemos aceptar que todos compitan, Lasso ha dicho que el partido de Correa debe participar porque en la vida hay que ganar en las urnas. El PSC siempre lo ha considerado así y no hemos apelado a subterfugios ni a caminos pocos claros en elecciones. Hay que ganar o perder siempre en las urnas. 

¿La gran cantidad de postulaciones de esta campaña complica el panorama político? 

Hay que preguntarles a personas que no tienen ni el 1% de aceptación a qué se lanzan. Eso deben responderlo ellos. Lo que sí le puedo decir es que en la Asamblea en enero y febrero de este año se hicieron cambios fundamentales en el Código de la Democracia y ahí reformaron varios puntos y eso ha hecho posible esta gran cantidad de propuestas. El Consejo Nacional Electoral solo puede cumplir, lo que hay que pregunrtarle es a la Asamblea por qué hicieron este desbarajuste. 

¿Qué plan tienen ustedes para la campaña digital que impone la pandemia? ¿Se nos viene un situación como la que ocurrió con la elección de Bolsonaro en Brasil?

Usar las redes sociales es una opción muy valedera por parte nuestra, eso es lógico. Vamos a hacer reuniones virtuales, pues no se puede físicas, con la mayor cantidad de representantes de la sociedad ecuatoriana dividida por sectores, tendrá el candidato Lasso una agenda agotadora porque tendrá que al menos deberá atender ocho o diez conferencias por internet diarios, si es que aún seguimos impedidos de salir a la calle. Lo propio lo hará Jaime Nebot, esa será la forma de comunicar por ahora, hasta que pase la pandemia y podamos salir a la calle a recorrer los barrios populares. 

Hubo críticas a una candidata suya en Pichincha, Michelle Pozo y se dijo que se está integrando las listas con personas de farándula. ¿Cómo las tomó usted?

Nosotros no tenemos modelos en nuestras listas. Yo he averiguado el caso de la chica que menciona, no tengo el gusto de conocerla, es una chica muy joven, recién ingresó al PSC hace un par de años, algo había escuchado sobre ella. No veo que le hayamos puesto en la lista por ser modelo. Ella se está preparando, ya mismo se gradúa de abogada, tiene cursos que le acreditan como una persona que ha estado estudiando, ha tenido otras actividades. Ella ha dado explicaciones sobre sus respuestas en redes sociales y si está ahí es porque ha hecho mérito en el partido. Es feo y vulgar juzgar a alguien sobre fotos en redes sociales, condeno esa actitud. A las personas se las debe respetar.