Back to top
11 de Abril del 2022
Historias
Lectura: 29 minutos
11 de Abril del 2022
Redacción Plan V
Jorge Glas y sus médicos aseguran que tuvo episodios psicóticos y riesgo de suicidio en la cárcel
0

Glas desplegó una gigantografía con la imagen de Rafael Correa, a su salida de la cárcel de Latacunga. Foto: Diario la Hora

 

Médicos psiquiatras dieron su testimonio durante la audiencia de hábeas corpus de Jorge Glas. Afirmaron que la salud y estado psicológico del exvicepresidente se ha deteriorado durante sus años en la cárcel. Glas salió este domingo en medio de ovaciones de sus seguidores.

Cuatro médicos dieron sus testimonios a favor del exvicepresidente Jorge Glas durante su audiencia de hábeas corpus, que se realizó el pasado sábado. En esa diligencia, el juez Javier Moscoso Cedeño, de la Unidad Judicial Multicompetente de Manglaralto (Santa Elena), aceptó este pedido y permitió que Glas saliera de la cárcel, quien tiene dos sentencias condenatorias por corrupción y un proceso en marcha. Glas salió pasadas las 11:00 de este domingo, 10 de abril, con gafas de sol y un arete en su oreja izquierda. Saludó a decenas de simpatizantes que llegaron hasta la cárcel de Latacunga para recibirlo. Se mostró visiblemente alegre mientras desplegaba una gigantografía con la imagen de Rafael Correa, quien fue su compañero en las presidenciales de 2013.

Esa escena contrasta con los testimonios de los galenos que describieron a un exvicepresidente con  episodios psicóticos durante su estancia en la cárcel. Uno de ellos afirmó que Glas ha tenido alucinaciones y muchas veces ha referido que ve sangre en las paredes cuando no las hay. Según estos testigos, las matanzas que han sucedido en este centro y en otros han afectado a Glas. El mismo exfuncionario además relató que un día se hizo marcas en el brazo porque ya no quería seguir viviendo. Asegura que le han cambiado la medicación de forma constante y que llegó a tomar hasta 14 pastillas con fines psiquiátricos por día. Contó además que ha recibido 70 amenazas de muerte, y ha sido evacuado cinco veces por los episodios de violencia dentro de la cárcel.

Estos son los testimonios completos de los médicos y de Glas.

Testimonio de Édison Alejandro Barreto Zambrano, médico:

El paciente Jorge Glas, como antecedente mantiene múltiples enfermedades y una de ellas es una enfermedad genética que no es curable como la espondilitis anquilosante, que es la enfermedad que más se valoró, metabólicamente, morfológicamente, físicamente lo que más interviene en la valoración. Esta espondilitis está diagnosticada hace 19 años aproximadamente, se la hizo en un laboratorio genético con el genoma HLA B27.

Teniendo un diagnóstico debe ser direccionado hacia esa patología, del cual se hizo un análisis exhaustivo en conjunto con otros médicos y las recomendaciones también está en la comisión de médicos para definir el estado de salud mental y físico del señor Jorge Glas, que se basan en un diagnóstico adecuado, en base a esto se puede dar un tratamiento adecuado, en la valoración clínica que está en la prisión se nota muchas falencias tanto en el diagnóstico como en el tratamiento. Hay muchos esquemas terapéuticos no justificados que no son viables en el paciente, no se justifican el porqué de la medicación, hay otras medicaciones que se le está dando y tiene el mismo efecto. Es decir, hay medicamentos que no se pueden combinar y hay medicamentos que sí, pero producen efectos secundarios no deseados, provocan efectos en inhibición de los otros medicamentos y otras interacciones que también provocan aumento de la interacción de otros de otros medicamentos.

Tanto así que se tiene algunos medicamentos que están sobre dosificados, muchos de los medicamentos que está tomando son adictivos, lo que está provocando que los síntomas del paciente no puedan ser sosegados aplacados, cada vez se vuelve más tolerante al medicamento y estos medicamentos no están surgiendo el efecto deseado, lo que llama la atención en el paciente son los cuadros de dolor, en los casos de espondilitis anquilosante la característica es la limitación funcional de las articulaciones, al no tener una rehabilitación física adecuada que es nula y en ningún momento la ha tenido, tanto el tratamiento farmacológico en estos pacientes para disminuir los síntomas, el tratamiento de rehabilitación física es importante para que las articulaciones puedan tener su movilidad natural.

Un paciente de 52 años que ya está teniendo síntomas de un paciente con un diagnóstico que lo debería tener a los 60 o 65 años, es decir que tenga un retroceso sintomático en el paciente, el tratamiento en estos casos se debe guiar básicamente en que la enfermedad no avance. Al no tener una estructura terapéutica adecuada en la enfermedad, está avanzada (y) el tratamiento lo que hace es parar ese avance o disminuir la velocidad del avance de la enfermedad, pero no ha tenido el tratamiento adecuado. La enfermedad se ha acelerado tan gravemente que los síntomas que presenta actualmente el paciente debería sentirlos después de 20 años, no ahora. Tanto así, que el paciente plantea una limitante como es el levantarse de la cama después de unas horas de siesta o dormir en la noche, la demora de poder levantarse o poder mover sus articulaciones adecuadamente entre 30 a 45 minutos, es un paciente con sintomatología grave, la recomendación está en la rehabilitación física, otra recomendación es que se mantenga la terapia adecuada al paciente sin sobre dosificar, ya que está provocando efectos secundarios no deseados. A pesar que nosotros ya elaboramos un informe con la comisión de seis médicos especialistas, hicimos las mismas recomendaciones hasta la actualidad (y) parece que no se ha modificado esto. Hay riesgo.


Seguidores de Jorge Glas llegaron hasta la cárcel de Latacunga para recibirlo a su salida. Foto: Expreso

"La enfermedad se ha acelerado tan gravemente que los síntomas que presenta actualmente el paciente debería sentirlos después de 20 años, no ahora", dijo el médico. 

Él está tomando una medicación que se llama Boldemax que sirve para aplacar los síntomas de dolor y de inflamación en sus articulaciones. El problema de este medicamento es que baja mucho las defensas, el sistema inmunitario del paciente, y el riesgo de tener infecciones o problemas infecciosos, respiratorios de cualquier índole es alto.  Se conoce que en la cárcel de Cotopaxi existe un pabellón de pacientes con tuberculosis, el riesgo latente de que (existan) guías penitenciarios o otros tipos de personas que sean asintomáticos, pero tengan la enfermedad puedan transmitir también al paciente y esta es una enfermedad que aumenta con la espondilitis anquilosante, y la administración de Boldemax, es potencial el riesgo de contagio.

Otras recomendaciones es que la zona en donde está habitando, es una zona muy fría. (Por) los síntomas y las características del ambiente que tiene que tener el paciente, no es el adecuado. El frío y el ambiente seco aumentan más la sintomatología de este dolor, el manejo farmacológico debe ser integral, es el punto y mi especialidad, el médico internista es el único especialista que tiene la capacidad de englobar a un paciente con sus varios signos y síntomas y enfermedades, para poder guiar a un tratamiento adecuado, existen especialistas como el doctor Cornejo y Tobar, por eso se hizo la valoración integral, porque su cuadro psicológico y psiquiátrico tienen mucho que ver y al parecer es potencialmente grave incluso hasta el punto de poder llegar a un cuadro psicótico, lo que es altamente riesgoso su vida.

Esto lo dirán los especialistas y, desde mi punto de vista, el paciente ha tenido cuadros que (en los que) alucina, muchas veces ha referido que ve sangre en las paredes cuando no las hay, insectos y que escucha voces que le hablan en la noche, en la mañana, todo el día. Esto es un efecto traumático después de los eventos sangrientos provocados en el centro penitenciario, provocando un trastorno psicológico, la salud mental del paciente también está muy afectada. La espondilitis anquilosante es una enfermedad que el paciente progresivamente va a tener cuadros depresivos por sus limitaciones, otro tratamiento de esta enfermedad es el cuadro psicológico, estas limitaciones provocan un trastorno depresivo, al agravarse con todos los elementos presenciados por el paciente han provocado un trastorno de carácter psicológico y psiquiátrico bastante severo, en este punto también lo conversamos con el doctor psiquiatra que es un especialista en pacientes en rehabilitación.

En las recomendaciones se indicó que necesita la atención especializada de médicos en conjunto, pero esto no puede ser en un centro de privación porque al restringir medicamentos va a sufrir de otros trastornos. Cuando yo retiro una medicación, la cual ya ha (provocado) una adicción, va a tener otros trastornos mucho más severos. Esta modificación terapéutica debe ser en un ambiente controlado completamente donde tenga que tener una enfermera, vigilancia y monitoreo continuo de un especialista de un médico general o enfermería además de tener el control preciso de la medicación, horario de mediación y administración. En la historia clínica están indicados muchos medicamentos que al día digiere, pero no estamos (seguros) si realmente los toma, o hay medicación que está demás, o si es la dosis precisa la que está indicada. Este esquema terapéutico debería ser en un centro controlado no en un centro de rehabilitación.


Jorge Glas subió a una camioneta a la salida de la cárcel de Latacunga. Usó gafas de sol. Foto: API

"el paciente ha tenido cuadros que (en los que) alucina, muchas veces ha referido que ve sangre en las paredes cuando no las hay", agregó el galeno. 

Como se ha indicado, (por) el estado inmunológico del paciente -debido a su patología y su tratamiento farmacológico-, en caso que se contagie de tuberculosis, y en el centro exista la tuberculosis multirresistente, en el país no existe el tratamiento específico para tratar pacientes de este tipo. Hay diferentes tipos de resistencias bacterianas en esta patología, pero se conoce que en el centro penitenciario existe este tipo de variante.

En el caso del covid, se sabe que las descompensaciones en pacientes inmunodeprimidos que tienen este ambiente son potenciales. El covid tiene una característica muy importante. Muchas veces el paciente no lo siente, se llama hipoxia silente. En el momento que haya una descompensación considerable, muchas veces es muy tardío el accionar y la terapia. Al contagiarse de estas enfermedades, hay un riesgo potencial de muerte. En el informe se indica que muchas de las terapias que habían empezado a conversar hay interacciones medicamentosas muy importantes y que afectan directamente a la frecuencia cardiaca. Se habla que existe una descomposición secundaria a los medicamentos, puede haber una taquicardia muy severa y esta tiene que ser reversible farmacológicamente o eclécticamente.

En el centro penitenciario no existen medicamentos que puedan hacer una reversión de una taquicardia o arritmia cardiaca, tampoco hay un desfibrilador cardíaco, no existen especialistas para hacer una buena reanimación o desfibrilación de un paciente como tal. En el caso que el paciente pierda la conciencia por esta misma patología, después de una arritmia severa, hace una parada cardiorrespiratoria (y) se necesita reanimación, ser intubados y conectados a un ventilador y esto no tiene ningún centro penitenciario.

Los dispositivos electrónicos tienen una potencia eléctrica muy bajita, no hay inconveniente en tener puesto un dispositivo eléctrico, la taquicardia que está potencialmente en riesgo es debido a los efectos secundarios de los medicamentos, pero es potencialmente reversible con un tratamiento adecuado, el dispositivo es diferente a la que provocan los medicamentos.

La contraparte accionada no desea realizar preguntas.

Testimonio de Michael Brune, médico psiquiatra y psicoterapeuta alemán:

Trabajo hace 25 años con pacientes víctimas de torturas, refugiados. El presidente de la CIDH ha creado una comisión de médicos y me ha llamado a participar. Fui a Ecuador, a principios de septiembre, e inicié una valoración psiquiátrica al ingeniero Jorge Glas en la cárcel de Latacunga. Tenía trastorno de ansiedad generalizada, pero era leve cuando entró a la cárcel. Cuatro años más tarde cuando lo vi, tenía un cuadro psiquiátrico grave, tiene un trastorno depresivo mayor con síntomas psicóticos, además tiene un complejo prolongado, de trastorno postraumático de estrés. En la cárcel, en un examen de conversación de dos horas, (vi que) él vive en un ambiente donde han sido causados sus enfermedades y agravados con el trastorno de ansiedad. Los trastornos se mantienen por las condiciones que están, además es permanentemente traumatizado por las experiencias que hay en la cárcel, el tratamiento psiquiátrico no es sistematizado, recibe medicamento con interacciones, permanentes cambios de medicación que no me parecen racionales. Como conclusión, él está en un ambiente (en el) que no se pueden curar sus trastornos psiquiátricos. Está con personas víctimas de torturas, permanentemente traumatizadas paralelas al paciente, que vive el ingeniero Glas. Allá necesita un psicoterapeuta experimentado en psico traumatología lo que no recibe, él necesita un tratamiento fuera de la cárcel, porque es imposible curarle, se van a agravar más antes que curarle.

"Cuatro años más tarde cuando lo vi, tenía un cuadro psiquiátrico grave, tiene un trastorno depresivo mayor con síntomas psicóticos", afirmó el médico alemán. 

Existe un riesgo de suicidio alto, pero no se puede decir cuándo pasará eso. Hay que sacarlo para que esto no termine en un suicidio. Se tuvo conversación con los familiares, con los hijos con la esposa, con el hermano del ingeniero Glas, no pude dar con el diagnóstico, pero hay problemas graves en la familia que se puede solucionar con la terapia familiar, pero para eso tiene que salir de la cárcel, tienen que estar presente todos, tiene que haber un plan.


La noche del domingo, Jorge Glas llegó a Guayaquil donde tuvo un recibimiento multitudinario. Foto José Beltran. El Universo

Testimonio de Rodrigo Fernando Cornejo León, médico psiquiatra:

Mediante oficio, la señora magister Cecilia Fernanda Medina Moreno, exdirectora Nacional de Derechos Humanos, Género e Inclusión del Ministerio de Salud Pública, convocó a 6 profesionales de la Salud, 3 siquiatras al doctor Carlos Tobar, Michael Brune y mi persona, y 3 médicos clínicos, al doctor Alejandro Barreto, al doctor Francisco y al doctor Édgar León para conformar una mesa técnica para una evolución desde el punto de vista clínico y del punto psiquiátrico.

Con respecto al ingeniero Jorge Glas, con el objeto de valorar las pertinencias de las intervenciones previas de la situación actual del paciente. Este informe que se encuentra en el expediente, según vi en el auto, fue suscrito por seis profesionales en la salud una vez (que fuera) consensuado, analizado y dialogado. En salud mental se tiene algunos puntos. Se hizo los análisis retrospectivos de la revisión de historias clínica, no hay claridad en el diagnóstico y no corresponden a las evidencias encontradas en las evoluciones, es muy poco claro cómo se hizo el diagnóstico. Ingresó con ansiedad generalizada leve y hoy ese no es el diagnóstico. Como lo indicó mi antecesor, es más grave.

En segundo lugar, no hay un diagnóstico diferencial para lo que ocurrió en el inicio y lo que está ocurriendo en este momento. Eso no ha constado sistemáticamente en la historia clínica.  En tercer lugar, de acuerdo a la revisión de historias clínicas, las intervenciones no son oportunas y en el momento que el paciente las necesita, por lo tanto, perjudica el cuadro del paciente. La valoración psicológica es ambigua porque hay múltiples psicólogos que intervienen, porque hubo muchos periodos de para en el tratamiento. No se evidencia un tratamiento sostenido. Soy médico psiquiatra con especialidad en neuro psico farmacología clínica. En las historias clínicas, hay una evidencia de fármacos denominados benzodiacepinas que se utilizan como ansiolíticos. La FDA recomienda que se lo utilice por un lapso no mayor a seis meses y se tiene que retirar paulatinamente, tiene que ser tratado por varios años. Adicional a esto las benzodiacepinas son cambiadas frecuentemente y también se evidencia cortes en la administración. Es decir, hay riesgo de vida en el paciente, con todo esto no se conoce ni se identifica el objetivo del tratamiento. El paciente indica que no conoce ni se le ha informado el objetivo del tratamiento, lo que ensombrece de manera significativa el pronóstico.

"las intervenciones no son oportunas y en el momento que el paciente las necesita, por lo tanto, perjudica el cuadro del paciente", afirmó el médico. 

Desde nuestro análisis no se entiende el objetivo del tratamiento por lo que carece de oportunidad. Aparecen alucinaciones que tienen que tener un estudio semiológico, que no necesariamente tiene que ser dentro del sitio donde está internado porque un diagnóstico post traumático puede generar este tipo de sintomatología si es que hay una constante re experimentación. Estando sometido constantemente al estrés, difícilmente van a dejar de aparecer estos síntomas, se va a agravar el cuadro y evidentemente como se está enfrentando la terapéutica donde se encuentra en este momento el ingeniero Jorge Glas no va a permitir que exista una salida.

En el informe conjunto entre los señores médicos clínicos y psiquiatras, concluimos que el tratamiento tiene que ser interdisciplinario, tiene que haber una coordinación entre la psiquiátrica y racionalizada con la medicación clínica, tiene que haber retiro de muchísima medicación y para esto se requiere un espacio controlado que preferentemente en un inicio sea hospitalario.

Se define como polifarmacia la existencia de dos o más fármacos, pero es negativa cuando dos o más fármacos tienen superposición cumplen el mismo efecto y además hacen sinergia, es decir, suman efectos adversos. Cuando existe polifarmacia, para que esta no sea nociva, tiene que ser coordinada de manera estricta entre los equipos y en el informe adjunto que les ha pasado el Ministerio de Salud. Evidenciamos que hay superposición entre (los) médicos que atienden en el centro de privación de libertad, entre médicos del instituto ecuatoriano de seguridad social y entre médicos privados. Esto quiere decir que, al no existir coordinación, el riesgo se incrementa porque no hay un registro adecuado de los problemas que los fármacos irían a solucionar, ocasionando riesgo en la estabilidad clínica y psiquiátrica.

Cuando hay mezcla de medicamentos, (estos) pueden afectar la parte psíquica cuando son psicofármacos, no la gastritis sino en todo el organismo en general. Existe un incremento de riesgo de suicidio por los motivos que evidentemente hay, un trastorno post traumático que recrudece el riesgo de atentado contra la vida sobre todo cuando se encuentra en una sobre exposición permanente a hechos de violencia, concomitante a las otras patologías que tiene el paciente que hacen subir exponencialmente sus índices de depresión por lo tanto no pueden ser tratados en una casa en un sitio que no haya atención especializada, la recomendación medica es que el paciente (esté) en un sitio en donde tenga posibilidades de tener acceso a un grupo interdisciplinario de médicos y terapeutas. Se emitió el informe en noviembre del 2021.

"Cuando hay mezcla de medicamentos, (estos) pueden afectar la parte psíquica cuando son psicofármacos, no la gastritis sino en todo el organismo en general", dijo otro médico. 

Testimonio de Carlos Alfonso Tobar Echeverría, médico psiquiatra:

Fui parte de mesa técnica solicitada por el Ministerio de Salud Pública, se realizaron entrevistas con el Ingeniero Glas, varias mesas técnicas para elaborar el informe, hay inconsistencias al tratamiento del Ingeniero Glas, se incurre en diagnósticos no precisos, no claros, no adecuados, con redundancias de fármacos con efectos adversos, con sintomatología en cuanto a la parte afectiva del Ingeniero, empezaba a empeorar que no tenía un manejo adecuado lo que generaba mayor deficiencia en la parte de calidad de vida y funcionalidad por lo que se emitió recomendaciones de un manejo integral a la patología tanto clínica como psiquiátrica y terapéutico como lo mencionamos y es muy difícil que sea en el centro penitenciario, se recomienda que sea en un nivel especializado.

Testimonio de Jorge Glas Espinel:

Quiero complementar porque han pasado algunos meses que los galenos hicieron su valoración y su informe, esta comisión de conforma por un mandato de la CIDH, por las medidas cautelares que fueron emitidas en años anteriores del cual soy beneficiario, siendo el resultado que estoy peor, en el último motín de esta última semana, después de esta comisión y esfuerzo científico académico y médico, en cambio, estoy peor. Me dan más medicamentos de lo que yo ya recibía cuando vinieron los señores médicos.

Yo tomo quetiapina como antipsicótico, tomo sertralina -que es un antidepresivo- y adicionalmente me mandaron gotas de risperidona que también creo que es antipsicótico. Cada vez que tengo alucinaciones de crisis auditivas y visuales y que se recrudecen cada vez que hay amotinamientos, tengo que salir evacuado. A veces no me alcanzan a evacuar, tengo dos años que no camino fuera de la celda, salgo el día miércoles al economato, tengo más de 70 amenazas de muerte.


Jorge Glas ha interpuesto diversos recursos para salir de la cárcel, entre ellos solicitudes de prelibertad y ahora el hábeas copus. Foto: Twitter

En diciembre fue exigido, y así lo expresé a las autoridades, a pagar una vacuna de veinte mil dólares para que no asesinen a mis hijos o no violarme a mí. Estaba en un estado lamentable metal y depresivo, las marcas en mi brazo que me hice el 31 de diciembre (fue) porque ya no quería seguir viviendo, aparte de eso me aumentaron risperidona en gotas y las dosis en pastillas de dos alprazolam que las cambiaron por clonazolam diarias. Ahora tomo tres alprazolam diarias, aparte tomo amitriptilina que es otro antidepresivo, y aparte de eso como medicamento psiquiátrico tomo zolpidem que es un medicamento hipnótico.

Se puede ver que tomo aproximadamente catorce pastillas psiquiátricas al día, entre antipsicóticos antidepresivos, ansiolíticos y otras cosas que se me pueda olvidar porque no soy médico, aparte me cambiaron el medicamento para la hipertensión arterial ahora tomo exforge que es una mezcla parceltan de amlodipina de 10 miligramos hidroclorotiazida de 25 miligramos, esto tampoco tomaba en el momento de la evaluación médica de los señores doctores a quien agradezco por el requerimiento del Ministerio de Salud y a la persona que viajó desde Alemania por tratarme porque soy torturado psicológicamente.

"Estaba en un estado lamentable metal y depresivo, las marcas en mi brazo que me hice el 31 de diciembre (fue) porque ya no quería seguir viviendo", dijo Glas al Juez. 

Con 70 amenazas de muerte, he sido evacuado cinco veces, me (he) enfrentado en fuego cruzado, me han sacado bajo metralletas, decapitaciones, me he resbalado en charcos de sangre, muy en particular en esta última evacuación traté de correr, no pude y me caí es porque la pierna izquierda no me responde, desconozco si es consecuencia de una de las 3 hernias discales que tengo en la columna producto de la espondilitis anquilosante, la degeneración de los discos.

Tengo que dormir con un collarín rígido por las hernias cervicales, tengo un estabilizador de titanio entre las vértebras L5 y S1 en la región sacro lumbar, es muy probable que la estabilizadora se haya movido y este presionando al nervio lo cual me está causando discapacidad, cojera, imposibilidad de correr en la pierna izquierda. Puede ser también que, por las amenazas de muerte, no camino por dos años, (he) terminado con algún tipo de atrofia muscular que esté causando esta disfuncionalidad en mi pierna izquierda. Esto es algo nuevo que los médicos no evaluaron, es decir estoy peor, aparte tomo atorvastatina que me ha subido la dosis de 20 a 40 miligramos a pesar que los exámenes no lo justifican, tomo loratadina, spray para el asma, hipertensión, mometasona, fluticasona, fisiol y también salbutamol para los ataques asmáticos. Siempre, los ataques de ansiedad suelen venir acompañados con ataque de asma.

Por la gastritis y colitis crónica que tengo tomo omeprazol me han subido la dosis de 20 a 40 miligramos, también un spray de bromuro de ipratropio por las reacciones alérgicas y asmáticas y una inyección mensual de boldemax que le mandan del IESS, porque es extremadamente costosa, que como explicó el doctor Barreto, frenan la enfermedad degenerativa genética de nacimiento que es la espondilitis anquilosante juvenil.

Es importante que conozcan que estoy tomando más y distintos medicamentos, que tomaba cuando ellos vinieron e hicieron los informes y que estoy peor tanto en lo psiquiátrico como físico. Tengo abierto un caso en el Comité contra la Tortura que avanza en las Naciones Unidas. Llevo tres años tratando que se me hagan exámenes médicos que no se me han podido realizar, me han aumentado los opioides como el tramadol de dos a tres pastillas diarias, diclofenaco de dos a tres pastillas diarias, paracetamol de cuatro a seis diarias con dosis intermitentes de prednisona por el dolor articular, esta mezcla es una bomba de tiempo.

[RELA CIONA DAS]

Revolución ciudadana: una organización criminal
Fernando López Milán
Un exfuncionario judicial pidió la restitución de los derechos políticos de Jorge Glas y un juez de Yaguachi lo aceptó
Redacción Plan V
En la "revolución", los plagiadores de la cúpula recibían homenajes
Mariana Neira
Independencia judicial y cese de pugnas: los temas urgentes de la justicia para el 2023
Redacción Plan V
Emerson Curipallo, el juez que en tres meses falló a favor de Jorge Glas y otros 15 presos por narcotráfico, sicariato y violación
Redacción Plan V
GALERÍA
Jorge Glas y sus médicos aseguran que tuvo episodios psicóticos y riesgo de suicidio en la cárcel
 


[CO MEN TA RIOS]

[LEA TAM BIÉN]

Ecuador puede llegar al récord de 7.000 asesinatos a fines de este año
Redacción Plan V
Las investigaciones sobre el crimen de Fernando Villavicencio avanzan en reserva y a contrarreloj
Redacción Plan V
Breves notas para un Ecuador sin rumbo: un paso adelante y dos pasos atrás
Daniel Zambrano
Las cuentas que no cuadran del impuesto a las botellas plásticas (primera parte)
Susana Morán

[MÁS LEÍ DAS]

Las investigaciones sobre el crimen de Fernando Villavicencio avanzan en reserva y a contrarreloj
Redacción Plan V
Las cuentas que no cuadran del impuesto a las botellas plásticas (primera parte)
Susana Morán
Los Noboa: las formas simbólicas y las fuentes del poder
Carlos Pástor Pazmiño
Plan V: diez años de resistencia para que el periodismo perviva
Juan Carlos Calderón