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24 de Julio del 2024
Historias
Lectura: 12 minutos
24 de Julio del 2024
Redacción Plan V
Wilman Terán despertó un gran sentimiento negativo en la conversación digital
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El pasado 17 de julio, Wilman Terán arribó a la Asamblea Nacional procedente de La Roca. Llegó con el uniforme naranja que utlizan los presos. Luego lo cambió por un traje formal. Foto Iván Matute / Asamblea Nacional

Con su estilo histriónico y frases cargadas de polémica, Wilman Terán, expresidente de la Judicatura, fue el protagonista de la conversación en redes sociales, la semana pasada. Uno de los temas que más reacciones tuvo que ver con las supuestas presiones a las que cedió en el caso Sobornos, que condenó a Rafael Correa a 8 años de cárcel.


La semana pasada fue intensa para Wilman Terán, expresidente del Consejo de la Judicatura. El miércoles, 17 de julio, tuvo una participación maratónica de más de tres horas en el Pleno de la Asamblea y, dos días después, estuvo en la audiencia preparatoria de juicio por el caso independencia judicial, en el que es uno de los involucrados.

En la Asamblea, Terán acudió al juicio político, que lo impulsó Jorge Peñafiel, asambleísta de Construye. Peñafiel acusó a Terán y a Maribel Barreno, exvocal del vocal de la Judicatura, de incumplimiento de funciones. Entre las causales para ese juicio, estuvo la actuación de Terán dentro de un proceso disciplinario contra el exjuez Walter Macías, quien fue sancionado con dos de los cinco votos de los vocales que integran la Judicatura.

Esos mismos hechos son parte del proceso penal por obstrucción de la justicia que lleva adelante la Fiscalía. La semana pasada, Wilson Toainga, fiscal general subrogante, acusó a Terán y a Barreno como autores directos de ese delito y solicitó al juez que sean llamados a juicio. En la Corte Nacional de Justicia, donde se llevó a cabo esa diligencia, Terán gritó al juez Julio Inga y a los policías que estaban en la sala. 

Pero fue su intervención en la Asamblea la que inundó la conversación digital. Con chaleco antibalas, se dirigió al Pleno después de un viaje tortuoso -según dijo- desde La Roca, la cárcel de máxima seguridad de Guayaquil donde se encuentra recluido. Terán llegó con un grupo de láminas que las organizó -aseguró- solo 10 minutos antes de su turno en la Asamblea. “Estoy viviendo un vía crucis desde el 14 de diciembre de 2023, día fatal donde parece haberse sincronizado un ataque sistemático y generalizado por parte de diferentes entidades del Estado”, fue uno de sus primeros lamentos.

Más de tres horas duró el discurso de Wilman Terán en el Pleno de la Asamblea. Foto: David Vela - Asamblea Nacional

Su estilo histriónico y sus frases cargadas de polémica dominaron la opinión pública. Según la herramienta de monitoreo Social Alert, la intervención de Terán generó más de 5.500 publicaciones, con una interacción de más de 160.000 comentarios, posteos y me gustas. Esta actividad involucró a una audiencia estimada de 12,3 millones de personas.

Estas cifras evidencian que la presentación pública de Terán fue uno de los temas principales de la semana pasada. Sin embargo, esa gran audiencia expresó un sentimiento negativo de casi el 97%. En otras palabras, el extitular de la Judicatura provocó comentarios mayoritariamente adversos y cuestionadores a los temas que planteó. Aunque ya ha pasado una semana, el sentimiento negativo no ha decayó en los siguientes días a su intervención.

Uno de los personajes que más resaltó en esta conversación fue el expresidente Rafael Correa. Él reclamó porque el SNAI no permitía la presencia física de Terán en la Asamblea, lo que para el exmandatario significaba denegar justicia. También se destacó una publicación de Luisa González, excandidata presidencial por el correísmo, quien retuiteó el mensaje de su líder.

Otro dato llamativo de las métricas de Social Alert es la baja participación de bots en la conversación digital. Según los análisis de esta herramienta, el 48% de las publicaciones e interacciones participaron personas y un 24% fue bots (aplicación de software automatizada que realiza tareas repetitivas en una red). En la zona gris, con un 28%, se quedaron los posibles bots.

La mayor parte de esta conversación se concentró en la red social X. Y allí los temas que más impactaron fueron los siguientes:

1. El caso Sobornos. Ese proceso terminó con la condena de 8 años de cárcel para Correa,  su exvicepresidente Jorge Glas y otros ex altos funcionarios de su gobierno. La fiscal Diana Salazar los acusó por el delito de cohecho. Terán fue parte del Tribunal de Apelación del caso y sobre este episodio dijo lo siguiente:

“Solo a un imbécil se le puede ocurrir que, a Wilman Gabriel Terán Carrillo, exjuez de la Corte Nacional de Justicia, puede llegar a un acuerdo de tal cosa. Pues, damas y caballeros, yo fui el juez, yo fui el juez (golpeándose el pecho con el puño) que le sentenció a Correa. Y fui el juez que corrigió el influjo psíquico mal ha dado de (Iván) Saquicela”.

“Yo, no fue Diana Salazar. Yo integré ese tribunal y, si integro ese tribunal y me revocan mi sentencia, yo tengo responsabilidades, como lo dicta el artículo 11, incisos finales de la Constitución y el artículo 32 y 33 del Código Orgánico de la Función Judicial. Entonces decir que el juez que le dictó la sentencia se ha conchabado para arreglar un recurso de revisión es severenda ignorancia. Cómo me arrepiento de haberme dejado llevar por esas influencias, cómo me arrepiento de haberme dejado incidir por ese tráfico llevado por parte de los emisarios que supieron hacer el ejercicio de persuasión (sic)”.

En otro momento del juicio, Terán reiteró que hubo influencias y que se arrepintió de haber cedido a ellas y a los emisarios que circularon supuestamente la noche previa “a cantar la resolución”. Animó a que se realice “un examen de los teléfonos”.

El posteo con más interacciones y comentarios sobre este tema salió en una cuenta en Tik Tok llamada Mi País Ec, que algunos de sus contenidos cuestionan a la fiscal Salazar.

2. Correa y su bancada, salvadores de Terán. Este fue otro tema que resaltó la semana pasada. La Asamblea no logró sancionar a Terán. La moción presentada por el asambleísta Peñafiel obtuvo 88 de los 92 votos necesarios para censurar al expresidente de la Judicatura. Los votos afirmativos provinieron del PSC, ADN, Construye, Pachakutik e Independientes. Mientras que 47 legisladores del correísmo se abstuvieron. Esto levantó las críticas de la oposición por defender a personas involucradas con el crimen organizado. Además del proceso por obstrucción a la justicia, Terán es uno de los involucrados del caso Metástasis, que investiga la relación entre el crimen organizado, la justicia y la política. Asambleístas del correísmo se defendieron al decir que Peñafiel no presentó suficientes pruebas contra Terán.

3. La camiseta naranja. Antes de ingresar a la Asamblea, Terán se cambió el uniforme naranja que llevan los presos por un terno oscuro y un chaleco antibalas. Así se presentó en el Pleno, pero llevó su camiseta naranja. “Sean atragantados en el fruto de sus males”, dijo el exfuncionario para quejarse de las condiciones en las que se encuentra en la cárcel y aseguró que ahora usa lentes porque ha tenido que leer en “esa oscura mazmorra”.

Wilman Terán llevó la camiseta naranja al Pleno de la Asamblea. Se quejó de los tratos que recibe en La Roca. Captura de Video

4. Los chats de Terán. El expresidente de la Judicatura llevó a la Asamblea nuevamente los chats que asegura haber tenido con la fiscal Salazar. En el juicio político pidió que el Legislativo intermedie para realizar una investigación a su celular. “Que contiene mi genética, mi ADN, versus el aparato celular también de ella (en referencia a Salazar). Y si no lo quiere así, que se forme una comisión internacional”, manifestó. Según Terán, en esos chats supuestamente Salazar presionó para ascender a una jueza. Peñafiel, el asambleísta interpelante, cuestionó a Terán por presentar chats en Photoshop.

Esos presuntos chats dieron una razón más al correísmo para ir contra la fiscal. “Lo importante: La gravedad de los chats periciados que demostraría una vez más el tráfico de influencias y las presiones de los causantes de la destrucción de la justicia: Saquicela, Camacho y Salazar”, escribió Pamela Aguirre, asambleísta de esa bancada, en la red social X.

5. La reacción de Diana Salazar. “Lo que vimos fue un show”, dijo la fiscal en una entrevista con el portal Visionarias. Recordó que Terán está vinculado a dos procesos penales. “Un show de una persona que se encuentra procesada por dos delitos graves. Por delincuencia organizada, por haber sido parte de un grupo que buscaba la liberación de uno de los mayores narcotraficantes y lavadores de activos que ha tenido el Ecuador, me refiero a Leandro Norero, quien negoció su libertad. Y por obstrucción a la justicia. Ese es la persona que fue aplaudido por una organización política y salvado por su responsabilidad política. Sin embargo, la responsabilidad penal es totalmente distinta”, manifestó.

Otras frases polémicas de Wilman Terán

-“Me han mandado a la Roca para callarme a fin de que no exprese las verdades que estoy expresando”.

-“Walter Macías era un juez al servicio de los casos de Diana Salazar, porque a ella le interesan sus casos. Pues en ese contexto me escribe en los chats que les he indicado”.

-”Los jueces de la Corte Nacional de Justicia están intimidados, en su mayoría están con investigaciones previas. Y solicito comedidamente a ustedes, señores asambleístas, que fiscalicen y pidan todas esas investigaciones previas contra los jueces de la CNJ y jueces provinciales a nivel nacional. Están llenos de investigaciones, bajo la amenaza extorsiva que si no cumplen esos vanos deseos de la Fiscalía General del Estado, esas investigaciones avanzarán”.

-”Mientras estaba viendo ayer el desarrollo de esta audiencia (en referencia al juicio político), sin que me vea el agente penitenciario, pude manipular el teclado y hacer un envío clandestino de esta información (en relación a su presentación para el pleno con textos jurídicos)”.

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