Fotos: Presidencia de la República. Fotomontaje: PlanV
El gobierno de Guillermo Lasso, que él mismo ha llamado "los 900 días" concluye este 23 de noviembre, cuando se realice la investidura del nuevo mandatario, Daniel Noboa. En las últimas horas, el régimen lassista, con la participación de una agencia internacional de relaciones públicas y comunicación digital, ha querido posicionar el "legado" del presidente saliente, con la publicación de un libro digital de más de 400 páginas y con la producción de una pieza de vídeo que es una especie de monólogo, en donde el mandatario da su versión de los sucesos económicos y sociales en el Ecuador durante su administración.
Tanto el libro, que recopila información de las instituciones públicas, al estilo de una rendición de cuentas, cuanto el vídeo, publicado en las cuentas de redes sociales de la Presidencia, parten de la consigna de que hay "detractores que dicen que Lasso no ha hecho nada" a los que el régimen piensa desmentir.
En el vídeo testimonial, inclusive, Lasso llega hasta las lágrimas, en una pieza de comunicación política que aspira a conmover y a presentar la imagen de un gobierno de sacrificio y expiación.
Pero más allá de la operación de propaganda política, que según la firma española Prodigioso Volcán no ha sido financiada con fondos públicos, quedan los decretos 947 decretos que Lasso había suscrito hasta la tarde del 22 de noviembre de 2023, en las últimas horas del régimen y cuando ya un importante grupo de ministros de Estado había presentado su renuncia para facilitar la transición con el nuevo gobierno.
Revisamos estos casi 950 decretos y elaboramos la lista de los 10 temas que enfrentó Lasso mediante decretos ejecutivos en función de su impacto político, social y económico.
1.- La crisis política y la disolución de la Asamblea Nacional: el 741
Guillermo Lasso aplicó el artículo 148 de la Constitución de Montecristi, que permite la disolución de la Asamblea Nacional y firmó la madrugada del 17 de mayo de 2023 el decreto 741, que significó también el fin anticipado de su propio periodo presidencial. Se trató de la llamada "muerte cruzada" una suerte de institución parlamentaria ajena a la tradicional constitucional ecuatoriana que los constituyentes cercanos a Correa decidieron implementar para blindar al régimen en caso de que llegara a perder la mayoría legislativa y la oposición contralara la Asamblea. La medida contempla unas elecciones adelantadas que sirven para elegir un nuevo gobierno y una nueva Asamblea, algo que el correísmo consideraba un seguro para mantener el poder con su eterno candidato.
Tropas del Ejército custodian el Palacio Legislativo tras la disolución de la Asamblea. Foto: Luis Argüello
La paradoja consistió en que fue Lasso quien implementó por primera vez el mecanismo, que resultó traumático para la clase política y provocó un reacomodo del mapa del poder en el Ecuador. Al mismo tiempo, puso fin al proyecto político de Lasso.
2.- Los estados de excepción contra la inseguridad
La emergencia de la violencia y la inseguridad, el aumento de las muertes violentas y la presencia de bandas de crimen organizado, sobre todo en la Costa, motivaron una larga serie de decretos de Lasso, relacionados con estados de excepción y suspensión de garantías constitucionales, así como con blindajes legales para las Fuerzas Armadas y la Policía. Ejemplos de este tipo de decretos fueron los nímeros 224, 411, 561, 588, 590, 601, 681, 692, 824, 841, entre otros, que en general siguieron la misma tónica: un planteamiento del problema relacionado con el aumento de la criminalidad y la violencia, en especial en las provincias de la Costa, y la declaratoria de emergencia para enfrentarla. El eje de la lucha policial contra el crimen también está presente en el libro del presidente saliente, en donde insiste en su teoría de que la eficaz acción antidrogas (que cuantifica en toneladas incautadas) ha sido respondida más violencia e inseguridad por parte de las pandillas criminales.
El abundante uso de este tipo de decretos motivó a la Corte Constitucional a recordarle al régimen que el estado de excepción no puede suplir a las medidas ordinarias que el Gobierno debe tomar para mantener el orden dentro del marco legal.
3.- Los estados de excepción en las cárceles
Convertidas en tierra de nadie y bajo control total de los capos de las principales bandas criminales, las cárceles ecuatorianas se convirtieron en otra preocupación de Lasso que expresó en varios decretos ejecutivos, con la intención, nuevamente, de facilitar el marco legal para intervenir en los penales. Y aunque se realizaron redadas y traslados, la estructura de control de los capos dentro de las prisiones se ha mantenido más o menos intacta. Pero por decretos del Gobierno no faltaron: algunos de ellos fueron el 210, 276, 823, 878, 257, entre otros, que al igual que en el caso anterior, buscaban abrir el camino legal para que las carceles pudieran ser intervenidas por la Policía y el Ejército con la intención de controlar la tenencia de armas, celulares y municiones, que, sin embargo, siguen apareciendo dentro de los penales.
Las declaratorias de emergencia en las cárceles fueron una constante en el gobierno lassista. Foto: Bolívar Parra-Presidencia Ecuador
4.- Los estados de excepción contra la protesta social
Al igual que su antecesor, Lenin Moreno, Lasso debió enfrentar jun estallido social y protestas organizadas por el movimiento indígena. El Gobierno recurrió a limitar las garantías constitucionales y a decretar estados de excepción en las provincias bajo control indígena, confiando en su efecto disuasivo, aunque con la única diferencia con Moreno de que no abandonó el Palacio de Gobierno, durante el conflicto político y social. Entre los decretos que Lasso implementó para controlar la protesta estuvieron el 455 y el 459, en junio de 2022, que invocaron la grave conmoción interna en las provincias de la Sierra norte y central. Los decretos de Lasso si bien facilitaron la movilización militar, en el fondo no lograron impedir que las movilizaciones indígenas llegaran a Quito y se desactivaron solamente con la mediación del clero católico.
5.- La derogatoria del reglamento de la Ley de Comunicación
Aunque Lasso se considera hasta el momento de dejar el poder un democráta, y sostiene que su gobierno no ha afectado la libertad de expresión, los choques con los medios fueron frecuentes en la administración de Lasso, mientras que varios periodistas dejaron el país por falta de garantías, en especial, en las provincias del interior de la Costa. Pero Lasso suscribió uno de sus primeros decretos, el número 32, con el que derogó el Reglamento de la Ley de Comunicación, lo que en la práctica volvió inaplicable la ley censuradora implementada durante el correísmo.
Lasso promovería luego otra ley, en donde desaparecieron prácticamente todos los instrumentos legales para el control mediático que con el pretexto de la garantía de derechos, había impuesto Correa y se había mantenido vigente durante la administración de Moreno.
6.- Los precios de los combustibles
El largo conflicto político y social relacionado con los precios de los combustibles motivó el estallido de 2019 y su reprisse en 2021. La intención del gobierno de Lenin Moreno de simplemente eliminar el subsidio a los combustibles, alegando que era una medida indispensable, dio inicio a un conflicto sin solución que hederó Lasso. Con los decretos 230 y 231, de octubre de 2021, se fijaron precios máximos para las gasolinas extra y ecopaís y el diésel, dejando en precios internacionales la gasolina super, que se volvió a ratos más cara que en Estados Unidos. La medida, al fijar un precio máximo, apaciguó las protestas sobre el tema y dejó fuera del debate el aumento de los precios.
Por otro lado, las medidas de focalización de los subsidios que se habían planteado como alternativas durante las mesas de diálogo con los movimientos sociales no prosperaron.
7.- El reglamento a la Ley Orgánica de Educación Superior y otros reglamentos
Guillermo Lasso publicó varios reglamentos, como el que modificó la Ley Orgánica de Educación Superior (LOES). Foto: Carlos Silva/ Presidencia de la República.
La labor de Lasso en la reglamentación legal fue extensa. Uno de los decretos más importantes en ese ámbito fue el 494, que reglamentó la Ley de Educación Superior. La norma legal, de 38 páginas, regula aspectos como el gobierno de las instituciones, la forma en la que se ejecutan los principios rectores del sistema, los aranceles, el control de recursos de origen público, la elección de autoridades, entre otros puntos. Otros decretos que estuvieron relacionados con reglamentaciones importantes fueron el Reglamento de la Ley del uso de la fuerza (decreto 755), el reglamento de la nueva Ley de Comunicación ( decreto 850), el reglamento de la Ley de Extinción de Dominio (437), entre otros.
8.- Las condecoraciones y los viajes
Más de 70 condecoraciones, algunas de ellas a funcionarios del gobierno saliente, de las órdenes Nacional al Mérito, Honorato Vásquez y San Lorenzo, y por lo menos 32 viajes con declaratorias de comisiones de servicios del presidente y su comitiva, forman otro eje de los decretos de Lasso. El presidente saliente repartió medallas a sus colaboradores, a personas de su entorno político y social, y a extranjeros que facilitaron algunos de sus programas que requerían de colaboración en el exterior.
Así mismo, oficializó mediante decreto viajes a Estados Unidos, Europa y otros país de América Latina en los cuales realizó un uso continuo del avión presidencial FAE 052, mientras que el jet Embraer FAE 051 se mantuvo sin uso, tras el fallido intento de venderlo a las Fuerzas Militares de Colombia.
Por lo menos 32 decretos ejecutivos oficializaron viajes de Guillermo Lasso al exterior, a bordo del avión FAE 052. Foto: Carlos Silva-Presidencia de la República
9.- El uso de armas para defensa personal
La creciente inseguridad fue uno de los motivos por los cuales Lasso firmó el decreto 707, que flexibiliza la posibilidad de tener armas para defensa personal y, por tanto, facilita las importaciones de armamento ligero nuevo, que había estado suspendida desde la época de Rafael Correa. La medida permitió que importadoras de armas empezaran a traer al país revólveres y pistolas, mientras que el control de los nuevos requisitos siguió a cargo de las Fuerzas Armadas.
El decreto provocó polémica, pues algunos sectores lo interpretaron como que el Estado dejaba a los ciudadanos a su suerte en materia de defensa personal y también se cuestionó que el uso de armas por parte de los civiles aumente la violencia en las calles.
10.- El Galápagos Life Fund
Guillermo Lasso y su ministro Gustavo Manrique facilitaron mediante un decreto la operación del Galápagos Life Fund. Foto: Más Galápagos.
Otro decreto polémico tuvo relación con Galápagos. Se trata del decreto 735, con el que el Gobierno facilitó un complicado mecanismo de canje de deuda externa por bonos relacionados con la conservación de la naturaleza, en especial, en las islas Galápagos, y este decreto permitió que un fideicomiso que opera en Estados Unidos tenga el reconocimiento del Gobierno del Ecuador y la participación de sus ministros en el directorio.
[RELA CIONA DAS]
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