Back to top
9 de Diciembre del 2020
Ideas
Lectura: 5 minutos
9 de Diciembre del 2020
Fernando López Milán

Catedrático universitario. 

Tres retratos políticos
0
Aparte de la perseverancia, que le llevó a presentarse como candidato a la presidencia de la república en tres ocasiones, Lasso es un hombre de convicciones. No admite los abortos en casos de violación y ha hecho realidad eso de que el que da bala recibe bala.

¿Hay Covid y desempleo, corrupción e inseguridad?

Lasso, Pérez y Aráuz lo pueden arreglar.

 

Aráuz

No es brillante. Es opaco. Y creo que se llama Andrés.

“¡¿Qué chug…y sapos y culebras estás haciendo?”, truena, desde Bélgica, un Correa indignado, porque, después de una semana en el Gobierno, Arauz no ha conseguido que le revoquen la sentencia de ocho años que la justicia le impuso por cohecho agravado.

“¡No hagas pucheros!, le grita, y ponte a trabajar. Hay que amenazar, injuriar, sobornar”. Y, furioso, corta de golpe la comunicación.

Arauz cuelga el teléfono, respira hondo, se limpia la nariz con la manga de su traje de dos mil dólares, y, ya más sereno, llama a Cristina Kirchner para contarle lo sucedido. Es cierto que ella también tiene su carácter, pero, tal como lo comprobó cuando aún siendo candidato viajó a la Argentina, no carece de instinto maternal.

Rabascall, que no lo deja solo ni a sol ni a sombra, se pierde un momento en sus ensueños. Como los foquitos intermitentes de un árbol de navidad en las oscuras noches de Quito, brilla en su mente un serrucho. Instrumento muy famoso en tiempos de Febres Cordero.

Arauz cuelga el teléfono, respira hondo, se limpia la nariz con la manga de su traje de dos mil dólares, y, ya más sereno, llama a Cristina Kirchner para contarle lo sucedido. Es cierto que ella también tiene su carácter, pero, tal como lo comprobó cuando aún siendo candidato viajó a la Argentina, no carece de instinto maternal

Yaku Pérez

Es un “hombrecomotodos”. Y para muestra basta verlo en calzoncillos. Igual que AMLO, el profeta mexicano, que prefirió, para enfrentar a los narcos, los abrazos a los balazos, él ha demostrado que el hambre, la corrupción, la violencia son problemas de actitud.

Yaku ama la naturaleza y a los animales. Anda en bicicleta y le gusta contemplar las puestas de sol en las playas ecuatorianas. Mucho no pasa en Carondelet. Y cuando está ahí, acaricia, con la mirada extraviada, a su osito de peluche. ¿Qué cosas puras y misteriosas ve Yaku en la lejanía?

Haciendo la flor de loto, medita en una estera que ha hecho instalar en el salón amarillo del palacio de gobierno. En el nirvana, no hay motos que se desboquen y den con la gente en el piso y le fracturen las canillas. La realidad, en cambio, es dura. También, para las bicicletas de bambú.

Atarihuana es otra de las facetas de la realidad, la de “nada en la vida es gratis”. No sabe qué hacer el suave Yaku con los duros del MPD.

Lasso

Es perseverante, sin duda. Y muestra mucha seguridad en lo que dice. Él sabe cómo hacerlo. ¿Cómo? Fungiendo de Celestina. Metido en este papel ha vestido o desvestido la economía ecuatoriana, como si de Jennifer López o Kim Kardashian se tratara.

No ha sido suficiente. La economía ecuatoriana padece de desnutrición crónica cuyas manifestaciones son, entre otras, la baja estatura y las piernas arqueadas. Y eso no se arregla con la cosmética económica.

Aparte de la perseverancia, que le llevó a presentarse como candidato a la presidencia de la república en tres ocasiones, Lasso es un hombre de convicciones. No admite los abortos en casos de violación y ha hecho realidad eso de que el que da bala recibe bala.

Los abortos siguen y las balas llueven. Y, encima, a Nebot se le ha ocurrido otra idea.  Lasso se está cansando. Recuerda que en su época de candidato lo disfrazaron de Juan Pueblo, poniéndole una gorra en la cabeza y una cerveza en la mano. No le fue bien.

Él quiere ser él. Si pese a su falta de carisma llegó a la presidencia de la república, no necesita de los socialcristianos para gobernar. Llama a Luis Pachala, el asambleísta que se quedó triste cuando expulsaron de la Asamblea a Anita Galarza, la bella. “Vamos a romper con los socialcristianos”, le dice. Y se siente, al fin, como el presidente ejecutivo del Banco de Guayaquil.
 

GALERÍA
Tres retratos políticos
 
1


[CO MEN TA RIOS]

[LEA TAM BIÉN]

Existe alta infiltración del crimen organizado en el Estado ecuatoriano, revela informe oficial
Redacción Plan V
Verónica Abad se va a Israel: ¿se desactiva el conflicto con Daniel Noboa?
Redacción Plan V
Caso Encuentro: los registros de las cámaras en la casa de Massuh, entre las evidencias de la Fiscalía
Redacción Plan V
Carlos Larreátegui y Ricardo Noboa chocaron en X por la Vicepresidencia
Redacción Plan V

[MÁS LEÍ DAS]

Acerca de la vida, la dignidad, el dolor y la luz de Paola Roldán: el Caso 67-23-IN
Redacción Plan V
¿Quiénes editaron el libro de Guillermo Lasso?
Redacción Plan V
El gran reparto
Gustavo Isch
Así quedó el mapa del poder en el Ecuador al asumir Daniel Noboa
Fermín Vaca Santacruz