El pasado 13 de enero, cerca de las 11:00, el Ministerio del Interior difundió por su cuenta oficial de Twitter los resultados del operativo Impacto 13 en San Lorenzo, Esmeraldas, que pasó casi desapercibido. Informó de la captura de tres presuntos integrantes del grupo Oliver Sinisterra, comandada por el supuesto ecuatoriano alias ‘Guacho’.

Era la primera vez que la web oficial de esa cartera de Estado mencionaba a quien las autoridades colombianas lo identifican como un disidente de la columna Daniel Aldana de las FARC que opera en el departamento colombiano de Nariño, fronterizo con Esmeraldas. ‘Guacho’ sería desde entonces uno de los nombres más señalados por las autoridades y la prensa: 14 días después de esa captura se registraría el primer coche bomba a un destacamento policial en Ecuador.

El atque al cuartel policial de San Lorenzo fue una reacción a la captura de la gente de Guacho.

A ‘Guacho’ se le atribuye los últimos atentados en la frontera norte, incluidos el ataque a militares en Mataje que dejó tres muertos y la captura de un equipo de diario El Comercio conformado por un periodista, Javier Ortega, un fotógrafo, Paúl Rivas y el conductor del vehículo. Efraín Segarra. Justamente de un video entregado como prueba de vida, Ortega, uno de los tres secuestrados, menciona entre las demandas el intercambio de “sus tres detenidos en Ecuador”.

La presión pública de colegas y familiares del equipo de El Comercio ha logrado que el país se preocupe por el tema. Foto: Sociedad de Cronistas Gráficos de Pichincha

La captura de los tres hombres fue realizada por agentes de la Unidad de Investigaciones de Delitos con Armas, Municiones y Explosivos (UIDAM), de la Policía Judicial de San Lorenzo. El operativo se ejecutó en Mataje. “Las acciones policiales tenían como objetivo neutralizar las actividades delictivas del GAOR (Grupo Armado Organizado Residual) quien es liderado por alias Guacho”, anunciaba el comunicado.

En la casa donde fueron aprehendidos se halló tres armas de fuego de diferente tipo y calibre (pistola, revólver), dos granadas de diferente tipo, 370 cartuchos de diferente calibre, cuatro alimentadoras 9 milímetros, 114 bornes de batería tipo pila, seis rollos pequeños de mecha lenta, 38 baterías, tres celulares. El armamento -dijo Interior- estaba siendo utilizado para “el despliegue de acciones violentas y criminales en la frontera colombo-ecuatoriana relacionadas a la extorsión y al control de cultivos de coca sobre el lado colombiano”.

Los detenidos fueron el ecuatoriano Patrocinio C.P. alias ‘Cuco’,  de 34 años; y los colombianos Fernando T.V., de 28 años  y James C.A. alias ‘James’, de 19 años. Ninguno de los tres aprehendidos registra detenciones anteriores. En el comunicado oficial se agregó que, según los informes de inteligencia, los sospechosos habrían participado en el atentado contra policías del Grupo Especial Móvil Antinarcóticos (GEMA).

Este atentado se dio el 2 de noviembre de 2017, a las 17:20 según reporta el diario oficial El Telégrafo, citando fuentes de inteligencia. "Una patrulla del Grupo Especial Móvil Antinarcóticos, GEMA, fue atacada con granadas y disparos en el control de San Lorenzo, en Esmeraldas. Fue una emboscada que por poco les cuesta la vida a cuatro uniformados especializados en la lucha contra el tráfico de drogas. Ninguno resultó herido, pero en su vehículo quedaron las huellas del ataque".

La razón del ataque tiene su antecedente político. Entre junio y octubre del año pasado, con el cambio de gobierno y de dirección en el Ministerio del Interior (salió José Serrano y entró César Navas) se dieron cambios estratégicos en la Policía Nacional: salió el comandante provincial de la Policía de Esmeraldas, y también fueron reemplazados los titulares de la Dirección General Antinarcóticos y de la Dirección General de Inteligencia, entre otras decisiones. El nuevo jefe provincial de la policía de Esmeraldas pidió refuerzos luego de constatar la impunidad con que operaban y circulaban las bandas de narcotraficantes de la zona, y también la establecer la peligrosidad y fuerza militar de las mismas. Así como la élite policial antinarcóticos, el grupo GEMA, empezó sus patrullajes en esa provincia. 

Fue en el sector de La Cadena, según conoció Plan V. Allí grupos armados los atacaron con fusiles y granadas. En la balacera no hubo heridos, pero un uniformado ecuatoriano estuvo desaparecido por unas horas tras lanzarse a la maleza para resguardarse. El expediente de este caso fue trasladado a la Fiscalía General, en Quito, un día después de la bomba en San Lorenzo, que estalló el sábado 27 de enero, luego de que el comando provincial había recibido amenazas y presiones para que la justicia libere a los tres detenidos del grupo de Guacho. Plan V conoció que estos tres eran pieza clave en la estructura de la organización.

El proceso judicial

La Fiscalía General de Quito es la que lidera las investigaciones de este caso. Los tres detenidos fueron procesados por tráfico ilícito de armas de fuego, que está en el artículo 562 del Código Orgánico Integral Penal. Es un delito que se sanciona con penas de cinco a siete años de cárcel.

En la audiencia de formulación de cargos, el Juez de la Unidad Judicial Multicompetente de San Lorenzo dictó la orden de prisión preventiva en contra de los detenidos y fueron trasladados a la cárcel de Esmeraldas. Dijo que el armamento encontrado en su poder “causa alarma a la seguridad pública”.

Pero el 15 de febrero fue vinculado un sospechoso más al proceso. Durante las investigaciones, el ecuatoriano Patrocinio C. contó a la Fiscalía que el 11 de enero de 2018 a las 18:30 llegó a su casa en Mataje y encontró a los dos colombianos que fueron detenidos junto con él. Aseguró que eran amigos de su cuñado colombiano, Fernando M. En Mataje las familias son colombo-ecuatorianas pues un pequeño río, el Mataje, apenas divide esta población que está en ambos lados de la frontera.

La Fiscalía dijo que presume que el nuevo sospechoso también podría ser coautor del delito de tráfico de armas. Pero Fernando M. aparece domiciliado, según el expediente, en la población de Candelilla, que pertenece al municipio de Tumaco, zona de alta producción de cultivos de coca. Tras la audiencia, el juez dictó la orden de captura del ciudadano colombiano.

El único ecuatoriano de este proceso buscó acogerse al procedimiento abreviado en febrero pasado y el juez de la causa convocó a la audiencia de esta diligencia. Pero la Fiscalía General reclamó pues solo el Fiscal, como titular de la investigación, puede solicitar este recurso previa negociación con el procesado para determinar la pena. Tras el rechazo de la Fiscalía, la audiencia fue eliminada de la agenda del sistema de la Judicatura. El proceso aún está en instrucción fiscal.

Más detenidos de ‘Guacho’ en Ecuador

El 5 de abril, en medio de la zozobra por el secuestro de los periodistas, el coronel Romel Tapia, jefe de la Policía de Esmeraldas, anunció la captura de nueve personas relacionadas con los últimos atentados en Ecuador y que podrían estar relacionados con alias ‘Guacho’. El ministro del Interior, César Navas, confirmó la noticia horas más tarde. Dijo que en total fueron aprehendidos nueve personas: cuatro involucradas en una detonación en la base de una torre de alta tensión y a 300 metros del Oleoducto, que las autoridades confundieron en un principio  con un atentado contra el puente de Viche y cinco con el coche bomba que explotó en San Lorenzo.

En este último grupo estaría el cuñado de alias ‘Guacho’. Ese dato se difundió a través de la cuenta del Ministerio de Defensa Colombiano. “Seguimos de manera mancomunada con autoridades del Ecuador para acabar con las amenazas del GAO residual en la frontera”.

Otro importante golpe para seguir cerrando el cerco de alias ‘Guacho’. Un reconocimiento a @FFAAECUADOR por estas capturas. La cooperación en zona de frontera es clave para desarticular estas bandas https://t.co/8lnJMjWHbw

— Juan Manuel Santos (@JuanManSantos) 5 de abril de 2018

Pero mese antes hubo otra aprehensión de gente relacionada con el disidente. Después del ataque al destacamento policial en San Lorenzo, el 16 de marzo el Gobierno informó de la captura de cinco personas en Guayas y Esmeraldas. Fue el operativo Libertador, resultado de las investigaciones de la Fiscalía, la Policía y las Fuerzas Armadas en la frontera norte.

Los cinco detenidos, según informó Navas, serían eran el brazo logístico y de seguridad de ‘Guacho’. Para encontrarlos, los uniformados allanaron 20 domicilios: dos en Guayas y 18 en Mataje, Ricaurte y San Lorenzo, las tres últimas poblaciones de Esmeraldas, fronterizas con Colombia.

“El sistema de cooperación con Colombia es fluido, producto de esta cooperación  se realizó el operativo Libertador  y gracias a la participación de Ecuador, Colombia pudo dar golpes como la detención de alias Cachi (segundo al mando del grupo de Guacho)”, dijo Navas en la rueda de prensa del operativo. Los secuestradores de los periodistas ecuatorianos incluyeron en sus pedidos la anulación del convenio entre Ecuador y Colombia para acabar con el terrorismo.