Si un niño, entre los 0 y los 5 años de edad, mantiene una desnutrición crónica, es un niño perdido. En ese tiempo es cuando, gracias a una alimentación adecuada, el cerebro se conforma y se consolidan los tejidos neuronales. El último informe de la Encuesta de Salud y Nutrición, del 2012, Ensanut, presentado a fines del 2013 por el Ministerio de Salud Pública, trae sorpresas en ese aspecto.  El informe ejecutivo reconoce que a fines del 2012, la desnutrición crónica por retardo de talla es del 25,3%. Es decir, uno de cada cuatro niños ecuatorianos pudiera estar afectado para siempre en su desarrollo.  

La única referencia sobre qué pasó en los años de la Revolución Ciudadana se encuentra en la página oficial del Sistema Integrado de Indicadores Sociales, Siise, en la cual, para datos sobre la Desnutrición Crónica se citan los resultados de la Encuesta Demográfica y de Salud Materna Infantil, Endemain, del 2004, en la cual el indicador nacional de desnutrición crónica es del 23,2%. Según estos datos comparativos de las dos encuestas, entre el 2004 y el 2012 la desnutrición crónica subió dos puntos. Sin embargo, el último informe del Gobierno dice que la desnutrición crónica cayó algo más de 8 puntos en el mismo período. ¿Cómo llegó el Gobierno a este dato? Los resultados oficiales de Ensanut 2012 citan la misma encuesta Endemain 2004, que consta en el Siise, pero el informe Ensanut 2012 cambia el dato de desnutrición crónica (2D, es decir dos desviaciones estándar de la norma internacional de la OMS en la relación edad-talla) de la encuesta Endemain 2004, como consta en el Siise, y lo coloca en 33,5%.

De esta encuesta, Endemain 2004,  también se desprende que por etnias, el sector indígena tenía la desnutrición crónica más alta, con el 46,7% de casos. Y que las tres provincias con mayor incidencia de desnutrición en su niñez menor de 5 años eran: Tungurahua (41%), Bolívar (39,9%) y Chimborazo (39,7%)

Para la última encuesta, Ensanut 2012, se establece que la desnutrición crónica para el sector indígena cayó al 42,3%. Mientras que para las provincias afectadas la situación sigue igual o peor: Chimborazo (48,8%) y Bolívar (40,8%) tienen más del 40% de su población menor de 5 años en estado de desnutrición crónica y siguen muy de cerca Cañar, Tungurahua, Cotopaxi, Imbabura  y Carchi, con una desnutrición que varía entre 30% y 39% de la población infantil. Otro dato interesante que reportan las cifras se da en la provincia de Loja. En el 2004, la desnutrición crónica se estableció en el 28,9%. Ocho años después, en el 2012, Loja entra en la lista de provincias con mayor prevalencia de desnutrición, en el rango del 30% al 39%. Santa Elena, provincia costera que no existía en el 2004, es la única provincia de la Costa con alta prevalencia de desnutrición crónica: mayor al 30% de su niñez menor de 5 años de edad.

16 DE ENERO DE 2013

ACLARACIÓN

A PEDIDO DE NATALIA DÉLEG, DIRECTORA DE COMUNICACIÓN DEL MINISTERIO DE SALUD

En una carta recibida en este portal el 16 de enero de 2013, la directora de Comunicación del Ministerio de Salud Pública, Natalia Déleg, se dirige a nuestro director, Juan Carlos Calderón (ver PDF) aclarando que, por las diferencias metodólogicas entre las encuestas Endemain del 2004 y Ensanut del 2012, "el análisis compativo que se ha planteado en este artículo no tiene validez". Asegura que las referencias de la OMS de 1977 "subestiman la desnutrición, como está ampliamente documentado en la literatura científica, por lo que la OMS hizo las nuevas referencias con toda la evidencia científica, las mimas (sic) que se han sido adoptadas (sic) por todos los países a nivel mundial". 

La funcionaria, en otra parte de la misiva, afirma que "diario Hoy (sic) está contraviniendo los códigos éticos del periodismo y la propia Constitución de la República" y exige una rectificación a este portal, que no tiene relación alguna con dicho periódico. En todo caso, cumplimos con publicar la carta en su integridad.